domingo, 16 de noviembre de 2008

Así comienza TWIN PEAKS

Retomo en esta entrada un viejo vicio que tuve al comienzo de este blog: poner los openings de las series de TV que más me han gustado, incidiendo en que en todos sitios podemos encontrar motivos para el disfrute. No podía dejar de recordar Twin Peaks, una serie que seguramente cambió más de un concepto en lo que debían de ser series televisivas de máxima audiencia. ¿Será David Lych el Alan Moore de las series? No lo sé, pero yo lo tengo en mi altar interior juntos muy juntos, y no sólo por Twin Peaks, claro.

Por si hay quien lea esto que sea tan joven que no haya visto al agente Cooper devorando tartas de cereza o a la terrible Audrey haciendo nudos con los rabos de esa fruta en su boca... ya está tardando en poner la máquina a trabajar. No se arrepentirán. Al menos de la primera temporada...

10 comentarios:

Ana Hidalgo dijo...

david lynch tiene una serie de televisión? no tenía ni idea. pues hay que ver aunque sean unos cuantos capítulos

Anónimo dijo...

Es una pena que todos esos hilos argumentales se resolvieran tan mal al final de la serie, pero como dices la primera temporada es una joya.

Y tiene el mejor episodio piloto de la historia, hasta ahora no he visto nada semejante a ese increíble puzzle de vidas entrecruzadas, qué manera de presentar a más de una docena de personajes fascinantes.

Ahora estoy bajándome la segunda temporada de "Dexter", serie de la que escuché hablar por primera vez contigo y María. La primera temporada es cojonuda y lo que he visto de la segunda en la tele no le anda a la zaga...

raúl quinto dijo...

Ana, si te gusta Lynch te gustará Twin Peaks, en ciertos aspectos es una mezcla entre Mulholand Drive y Blue Velvet

Rubén, era difícil resolver semejante lío, pero bueno, sirva para los que disfrutamos del camino más que de la meta... (todavía me pongo enfermo cuando recuerdo el OVNI...)

Y Dexter es una pasada, la segunda temporada es mucho mejor que la primera, tiene uno de los discursos más escalofriantes que he oído en la tele: el oscuro pasajero.. uf, alguna vez germinará algo de ahí, algo oscuro también, claro.

Stalker dijo...

¡Raúl, como se nota que eres de mi misma Quinta (mal juego de palabras)!
Twin Peaks es de lo mejor que ha hecho David Lynch, y recuerdo que ahí está la que quizá sea mi escena favorita en toda mi filmografía.
Creo, incluso, que se le pueden perdonar los deslices argumentales porque los productores presionaron y forzaron a Lynch a revelar al asesino de Laura Palmer, cosa que él no tenía intención de hacer.

Salve

raúl quinto dijo...

stalker, que vengan ahora a decirnos que los 90 fueron un erial... lo que cuentas es la cruz que ha cargado Lynch toda su vida (piensa en Dune) aunque el malrollo con los productores de la tele hizo posible otra obra maestra como es Mulholland Drive.

Por cierto, ¿cuál es esa escena?

Stalker dijo...

[modo spoiler on]

Glups, espero no fastidiar a nadie revelando esto, pero mi escena favorita es aquella en la que el agente Cooper yace en el suelo con un tiro en el pecho y llega el extraño y ancianísimo camarero del hotel y la subsiguiente y absurda conversación que mantiene con él... una escena surreal, trágica y cómica, inesperada, deliciosa, onírica...

También me gusta mucho el último capítulo en la habitación roja... increíble. Y hay muchos otros momentos inolvidables...

la última caja de la serie lleva las introducciones a cada capítulo realizadas mirando a cámara por la impagable Lady Leño... eso es algo que no hay que perderse...

[modo spoiler off]

Por cierto, se han metido mucho con Dune, y a mí es una película que me gusta; en concreto, la primera parte creo que tiene un buen ritmo narrativo, y es un intento a cara descubierta de llevar a la pantalla una historia tan difícil para el cine como la de Frank Herbert.

Hay por ahí una edición extendida de Dune con 50 minutos más de metraje, muy curiosa...

raúl quinto dijo...

Qué grande.

El problema de Dune es que es poco Lynch, a saber qué hubiera hecho sin tantos corsés...

Stalker dijo...

Pero también el Hombre elefante, con su manera de filmar más clásica, es poco lyncheana en el fondo...

La gracia es que Dune, de algún modo, es un producto típicamente lyncheano pese a las presiones y problemas que tuvo con la producción. A mí me sigue pareciendo una película muy digna a pesar de sus fallos (sobre todo en la segunda parte, cuando se hace ostensiblemente épica, decae bastante...)

Anónimo dijo...

Otra buena pregunta es qué hubiera hecho Jodorowski con Dune, y con Dalí-robot a modo de emperador galáctico.

Raúl, ese episodio del ovni fue el último que vi, preferí quedarme con lo bueno de la serie antes de que terminara de degradarse...

raúl quinto dijo...

stalker, a mí me encanta el hombre elefante, y la secuencia con la que comienza es una maravilla. Aunque sea poco Lynch ciertamente. Y Dune, pues no está mal, no es ni mucho menos su peor peli, para lo cual tengo una candidata inexorable...

rubén, me tiemblan las canillas de imaginarme ese engendro dunesco, podría haber sido maravilloso, o el peor truño de la historia, en la onda d los dos protoautores... con lo del ovni hiciste bien, que duda cabe.